Dada la situación actual de crisis cronificada que dura ya casi 5 años y que los analistas más optimistas alargan hasta 5 años más, las empresas se han visto obligadas a reducir sus recursos materiales y humanos, en mayor o menor medida y de forma proporcional a su volumen de negocio y mecanismos de financiación más o menos saneados.
La adaptación es un factor imprescindible en las organizaciones ya que cada vez más las empresas tienen que estar preparadas para ofrecer igual o mayor servicio con menos recursos. Se requieren perfiles de trabajadores polivalentes, con formación y gran motivación. La formación profesional continua es una herramienta imprescindible para facilitar dicha adaptación.